Siempre me ha hecho gracia esa arrogante ignorancia con la que los nazis de distinto pelaje se reivindican como raza pura. Como si existieran las razas puras. No hay un solo ser humano que pueda considerarse raza pura, porque desde que el hombre comenzó a caminar sobre la tierra, se dedicó deportivamente a asaltar cuantas comunidades encontró a su paso y a violar a cuantas mujeres encontró. Luego ¿quien puede reivindicar la pureza de raza siendo como somos descendientes de aquellos bárbaros y no del insípido Adán como la iglesia quiso hacernos creer.
Pero de todos los estúpidos afanes por encontrar la supremacía de la raza, el más absurdo fue el de los nazis. Vaya usted a saber las borracheras cerveceras que pillaron aquellos rubios hervidos para que se les metiera en la cocotera que la raza pura era la raza aria y ellos sus representantes. Y cuando buscas información acerca de la raza aria, te encuentras con la divertida sorpresa de que los arios, si existieron como tal, surgieron de la antigua Persia, hoy Irán, en cuyo caso, lo más parecido que podríamos encontrar hoy a un ser superior sería algo así como este señor de la foto.
Y puestos ya a decir sandeces, vean el contraste con la imagen de la otra foto, de cuya raza decidieron los supuestos seres superiores que se trataba de una especie tan inferior que no podía considerarse ni humana. Puestas así las cosas, entran ganas de formar parte de los no humanos ¿no?